El proyecto Vincles: se hace camino al andar - Manuel Cases

ADDAREVISTA 37

UN POCO DE HISTORIA

Mataró, una próspera ciudad costera y mediterranea cercana a Barcelona, tiene para ADDA una especial afección: una relación de preocupación y esperanza, pues el hecho sucedido hace 7 años (la denuncia pública que hizo ADDA de los métodos brutales que empleaban para sacrificar a los perros que permanecían en su perrera, a los que gaseaban) apareció en todos los telediarios y medios de comunicación de España. El escándalo removió conciencias y a partir de entonces, al menos en Cataluña, se dieron pasos decisivos. Primero fue la Generalitat, mediante una normativa que regulaba estrictamente los métodos de autanasia permitidos para el sacrificio de animales de compañia y más tarde con una decisión por parte del ayuntamiento de Barcelona de no sacrificar perros ni gatos en su centro de Acogida de la Arrabassada, CAAC. Después vendría la aprobación de la segunda ley catalana de protección de los animales en el año 2003 en la que, aparte de una moratoria, se prohibía en todo el territorio el sacrificio de gatos y perros por refugios y centros de acogida, actualmente ya plenamente en vigor desde el año 2007.

Mataró, puede decirse, fue el detonante para una mejora sustancial y progresiva del bienestar animal referente a los animales de compañia. Lo ocurrido - vale la pena recordaro por su trascendencia-, obedecía a que las administraciones locales, no tan solo las de Mataró, sino las de muchos otros municipios, tenían por costumbre encargar la recogida, "limpieza" de las calles y el sacrificio, pasado por el corto plazo que permitía la ley, a empresas dedicadas también a la desratización, fumigación, desparatización, etc. Las imágenees captadas con cámara oculta por un trabajo sensibilizado fueron las que ADDA facilitó a los medios junto con la denuncia de los hechos. 

Pero esto ya es pasado y de aquellas tristes cenizas floreció un nuevo enfoque: quien asumió la dirección de la perrera municipal, la Fundación Altarriba, decidió no sacrificar y actuar con una mentalidad proteccionista. Finalizado el convenio con Altarriba, en centro pasó a otras manos con experiencia en gestión, pues también llevaban una protectora ubicada en Can Pilé, cercana a la población. Sus impulsoras fueron y son Silvia Serra e Isabel Navarra quienes, poco a poco, dirigiendo la Sociedad Protectora de Animales de Mataró, la SPAM, con una férrea voluntad y unas miras muy bien determinadas, fueron adaptando y perfeccionando los dos centros, no tan sólo remozando sus estructuras y organizaciones, sino, lo más importante, con sentido de la organización, protocolos e ideas cada vez más avazadas y acordes con la profesionalización a la que están obligados los refugios y centros de acogida del futuro.

Aprendieron pronto y bien. De sus manos surgió una nueva forma de presentar la adopción, de salir a la calle, de darse a conocer, de publicitar a sus animales con motivo de fiestas o eventos públicos de tener Rastrillos, de editar una dignísima revista ("Peluts") y tantas otras pequeñas ideas que si están bien diseñadas pasan a ser grandes. No nos engañemos cuando las administraciones ven que quienes gestionan un refugio adquieren conocimiento y respaldo público por una labor bien ejecutada, son proclives a implicarse y a ayudar, tanto material como institucionalmente, pues con eso consiguen prestigio.

EL PROYECTO "VINCLES"

El pasado 21 de noviembre de 2008, la SPAM daba un paso más. Un paso de gigante, diríamos, y se colocaba a la cabeza del proteccionismo español. Hacía público y presentaba en su remozado refugio de Can Pilé en Mataró, ante autoridades y animalistas el proyecto "Vincles", en castellano, Vínculos. En síntesis el proyecto tiene dos versiones: la educativa para escuelas y la de terapia para personas con problemas.

"VINCLES" EDUCATIVO

Es necesario revertir a la sociedad la ayuda recibida. Los refugios viven y se mantienen de lo que reciben de la sociedad: administraciones, empresas y particulares. Este proyecto consiste en mantener a los animales, sobre todo los que desean vivir; que se agarran con fuerza a la vida, y que por su edad, aspecto o circunstancia, no encuentran quien quiera adoptarlos, quedando como residentes perpetuos en el albergue, a la espera de que les llegue la muerte natural. Matar a un animal - En Cataluña está prohibido por ley, pero se ha autorizado ocasionalmente a partir de peticiones de ciertos municipios- es indigno de tiempos avanzados.

También son precisos recursos humanos para preparar a todo un equipo profesional, pues en la especialización reside el éxito, así como en la confianza y el apoyo del Ayuntamiento de Mataró y de la fundación Affinity en este caso, a la que se puede y debe añadir mucha más gente. Hay que instituir la figura del Mecenas, ya sea a título particular, colectivo o mercantil. "Si creamos vínculos todos ganaremos", decía Sílvia Serra, presidenta de SPAM, "No podemos separar los refugios y centros de acogida de lo que es el punto de mira a nivel social; ambos tienen que ser útiles a la sociedad. No se pueden tener animales encerrados sin ningún otro sentido". Los animales de compañia, al igual que todos los otros son útiles y necesarios; si no se hubiesen creado los echaríamos muchísimo en falta; ahora, ocn esta nueva vertiente de dinamizar a estos residentes forzosos de los refugios para que los niños aprendan de ellos, se abre una nueva iniciativa de cara al futuro.

"Víncles", dirigido a los niños y niñas de 9 a 12 años, de primaria y secundaria, tiene como voluntad prioritaria educar a nuestra sociedad sobre los perros abandonados dentro de los campos de acogida. Hay que formar a los niños con responsabilidad y respeto. Que no los abandonen, que no los maltraten. Algo que además provoca tantos problemas en este tipo de centros. Esto tampoco tiene que entorpecer el trabajo del día a día, de recogida, de adopcion, etc.

Los monitores empiezan su trabajo en la misma escuela y se les explica a los niños todo aquello que se lleva a cabo en la protectoray como viven sus residentes. También se fomenta el respeto por los animales y la buena convivencia entre éstos y las personas. "Víncles" explica al futuro ciudadano que su tenencia debe ser responsable (un animal no es un juguete), como se educa a un perro, la necesidad de recoger los excrementos, como se le debe pasear, etc. Más tarde la escuela visita el centro, que materializa lo explicado en un recorrido cercano a una hora; se hace un simulacro de cura a un animal, e indica cuales son sus necesidades alimenticias y otras actividades. Al final se les entrega un dossier expicativo adaptado a su edad. Los centros deben disponer de una zona ajardinada, como es el caso de Can Pilé, sencilla pero digna, para facilitar la actividad escolar a la escuela que lo visite.

"VINCLES" TERAPÉUTICO

Orientado como está "Vincles" hacia aquellos, diga­mos, residentes perpetuos de los centros de acogida, se les dinamita a través de un uso social; aquel animal por lo general calmado y bondadoso, con su presencia, impulsos o edad, puede interactuar tanto con niños como adultos, o discapacitados mentales: autis­tas o con síndrome de Dawn. También funcionan con discapacidades físicas: problemas de movilidad, habla o ceguera, o de tipo afectivo: familias desestructura­das y otras problemáticas afectivas y emocionales. Su efectividad paliativa para estas terapias está suficien­temente probada.

El programa se estructura en el refugio de Can Pilé, un espacio adaptado especialmente y dividido en tres zonas independientes, donde se puede trabajar cn gru­pos o individualmente, según el caso. Normalmente es preferible el exterior, y esta división favorece la intimi­dad cuando ésta se requiere. Las zonas se monitorizan a través de un ecólogo, que prepara a los perros espe­cificamente para cada tipo de terapia. Resulta decisiva la colaboración y ayuda de la Fundación Affinity. Desde 1988 promueve el papel de los animales de compañía y coincide plenamente con el proyecto "Vincles" para mejorar la calidad de vida de las perso­nas mediante las terapias asistidas con animales, y diri­gidas por profesionales de la salud mental: psiquiatras y pedagogos con unos objetivos muy claros, y que pro­curan un buen trato a estos animales "que nadie quie­re" dándoles compañía, amor y bienestar.

La terapia asistida con animales no es reciente. Según María Azcargorta, Directora de la Fundación Affi­nity, apareció a mediados del siglo pasado en Estados Unidos, gracias al etólogo Bobby Svendson y a su perro Cingle. No obstante, existen referentes de su existencia en los años 1700 y 1800. Affinity, ahora en colaboración con "Vincles", viene promoviendo estas terapias desde principios de los años noventa y lleva presentados, aparte de Congresos, 50 programas. Según Azcargorta: "se puede afirmar rotundamente que los animales de compañía son una fuente de salud, pueden mejorar la calidad de vida de cual­quier persona y encajan a la perfección con aquellos colectivos con necesidades especiales, pues establecen un puente de comunicación entre el paciente y el terapeuta".

"VINCLES" TERCERA EDAD

Está dirigido a la gente mayor que vive sola, a grupos de ancianos que realizan salidas como diversión, cul­tura y entretenimiento, y a residencias que precisan terapias asistidas con pacientes de alzheimer. Está demostrado que la presencia de perros, más afectivos y extrovertidos, en colectivos con necesidades espe­ciales, consigue reducir la sensación de soledad, mejo­rar su autoestima (la persona mayor se siente más útil) y favorecer la movilidad: obliga a salir de casa, pasear, y además, disminuye la depresión.

Como el caso anterior, el programa se estructura en el exterior -siempre que la climatología lo permita- en un espacio adaptado y dividido en zonas indepen­dientes que permite trabajar en grupos o individual­mente, según el caso.

ADMINISTRACIONES, PATROCINIOS Y MECENAZGO

Expresábamos al principio que "Vincles" es una acti­vidad eminentemente social. En cualquier sociedad moderna el bienestar de las personas y por extensión de los animales, corresponde a las administraciones, a sus programas electorales, que más tarde deben refle­jarse en la legislación, financiación y actuaciones. Su campo de actuación es amplio y muchas veces excede de sus posibilidades, por lo que deben recurrir a ser­vicios externos con mayor conocimiento y especiali­zación para acometer estas tareas. Los refugios y cen­tros de acogida actúan numerosas veces como tales, si los resultados resultan positivos, benefician la buena imagen del gobierno, diputaciones, entes supra-municipales, administraciones locales, o ayun­tamientos. Estos organismos no quieren problemas, y se minimizan cuando los servicios prestados se reali­zan con profesionalidad. Esta situación resulta ambi­valente, pues hoy en día las ONG de carácter social dependen en gran parte de las subvenciones.

Lo anterior quedó palpablemente reflejado durante la presentación pública del proyecto Vincles el pasado 21 de noviembre de 2008. Así lo expresaba Dolores Gómez, diputada presidenta de Salud Pública de la Diputación de Barcelona: "debemos dar recursos financieros y técnicos; vimos que "Vincles" era un buen proyecto porque traspasaba la labor de una pro­tectora, ya que sin abandonar los servicios propios integraba la vertiente educativa para escolares, y de terapias para mucha gente necesitada". También se refirió al hecho de que los escolares pueden salir a la calle y visitar el centro como una actividad más; y al estar abierto al público los fines de semana, permite que las familias puedan visitarlo, animando a otros centros a adaptarse a esta nueva faceta. Gómez se comprometió a darlo a conocer a nivel provincial en Barcelona y que otros centros "lo tomen como expe­riencia". Actualmente en Badalona la Diputación está trabajando en terapias mentales.

Quien vive por proximidad los problemas, solucio­nes y proyectos, es siempre el ayuntamiento donde se localiza el centro. El de Mataró estaba plenamente representado por Carme Esteban, concejala delegada de Medio Ambiente, que desde hace tiempo sigue y apoya el buen hacer de la SPAM, protectora y centro de acogida de quien depende su concejalía; Esteban abundó en el cambio sufrido por el perro destinado antes a la caza y como vigilante en el campo, y que ahora es animal de compañía, protegido por la ley, y en un medio urbano muchas veces saturado "la con­vivencia y la tenencia a veces se complican y los ayuntamientos viven los problemas que surgen entre los que están a favor y en contra de los animales". Ramón Bassas, alcalde accidental de Mataró y pre­sente en este acto, resaltó el gran cambio estratégico ocurrido en la vida rural, donde los animales siempre habían estado insertados, y en la vida urbana, en las sociedades modernas "tenemos que redefinirlo, pues ahora con este tipo de vida se reclama que haya mas­cotas, animales de compañía; tenemos que encajarlo y resolverlo para aprovechar esta relación que siempre ha existido entre personas y animales y que tiene miles de años". Bassas se refirió a este cambio estraté­gico mentando el buen servicio que esta dando el SPAM, que dispone de asistencia las 24 horas, y ahora, con la presentación de "Vincles", alabando el, gran trabajo de aquellas personas que quieren dedicar una parte de su vida y de su trabajo a mejorar las con­diciones de los animales, conexionándolas con las per­sonas; "es un trabajo que tiene futuro; no se acaba aquí, esto sólo es el embrión".

Otros entes privados son necesarios para que estos ambiciosos proyectos puedan seguir adelante y perfeccionarse. La Fundación Affinity, como se ha expuesto, lleva ya años apoyando iniciativas y es de esperar que ante la novedad y profesionalidad de la SPAM como promotora, se involucre cada vez más en el apoyo y difusión de "Vincles". La figura del mecenas, ya mentada en este artículo, tiene que ser otro acicate para que con su aportación económica pueda scntir la satisfacción de poder beneficiar a per­sonas y animales. A su vez, la legislación, a través de la declaración de renta beneficia los donativos a funda­ciones y asociaciones declaradas de Utilidad Pública, con un 25 %, y si es un ente jurídico con un 35 % en el Impuesto de Sociedades.

CONCLUSIONES

Queda claro que de cara al futuro, el proteccionismo debe abrirse a nuevos horizontes; las antiguas perreras deben ser olvidadas, porque ya no son «depósitos" de animales abandonados. Deben profesionalizarse en protocolos, proyectos y actividades que unan a los animales de compañía con las necesidades crecientes de la sociedad. Si a esto se le añade que el problema en el origen, el abandono, se controla mediante una continuada inspección y sanción de los tutores (ADDA no utiliza la palabra "propietario") que no tengan su mascota identificada y censada, las protec­toras y los centros de acogida, que siempre serán necesarios para solventar variadas situaciones, podrán tener el número adecuado a la capacidad de residentes y así conjuntar una actuación como la que aquí se ha venido detallando.

ADDA Defiende los Animales se siente orgullosa de presentar en primicia como medio de comunicación externo, el proyecto "Vincles"; y agradece a la Socie­dad Protectora de Animales, SPAM, de Mataró, el haber sido invitada para esta ocasión que puede mar­car pautas para un esperanzador futuro.

Sociedad Protectora de Animales de Mataró, SPAM. CAAC, c/Galicia, s/n. 08303 Mataró. Cataluña, España.      Tel.  34 93 741 40 91.

Can Pilé. Ctra. N 11, km 648,4 08303 Mataró, Cataluña, España. Tel 34 93 796 33 14.

 

Ong ADDA  Diciembre 2008


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