Animales en las carreteras -Prevención de accidentes

ADDAREVISTA 47

Cómo salvar tu vida y la del animal en carretera

Merrit Clifton

ANIMAL PEOPLE, un diario independiente y no ligado a ninguna entidad, es líder en los Estados Unidos en la defensa de los animales; fue fundado en el año 1992 y tiene una cobertura mundial. Merrit Clifton es uno de sus editores. Reportero, redactor, columnista, corresponsal en el extranjero y, desde el año 1978, especializado en cubrir las noticias sobre los animales y su hábitat. Clifton fue miembro fundador de la «Sociedad de periodistas ambientales» y ha sido galardonado en cuatro ocasiones con el premio nacional de periodismo de investigación, su especialidad. Nos relata para ADDA Defiende los Animales una serie de consejos para evitar los atropellos de animales en las carreteras, lo que, además, le puede salvar la vida a usted y su familia.

¿Cómo evitar el atropello de animales en la carretera? Los consejos más importantes

Es más fácil y más seguro anticiparse a los animales en la carretera que evitarlos una vez se les tienen encima. Se debe estar atento a los movimientos en los bordes de la carretera, especialmente si están llenos de maleza. Recuerde que la mayoría de las líneas del bosque están en verticalidad. Si es en horizontalidad, como la calzada, si ve un obstáculo, puede tratarse de un animal. Respete las señales informativas de tráfico, que para esto están, conduzca a la velocidad señalada o recomendada y, muy especialmente, extreme la precaución si existen avisos específicos de peligro por el cruce de animales.

La velocidad excesiva es mala consejera, precipita los acontecimientos y reduce el tiempo de reacción del conductor.

Ciervos

Según la Insurance Institute for Highway Safety (Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras), durante el año 2003 en EE. UU., 210 ciudadanos murieron al chocar con un ciervo.

Los estudios indican que hasta un 70 % de los accidentes causados por atropellos de ciervos ocurren cuando al ver un primer ciervo, el conductor frena para evitarlo y al volver a iniciar la marcha choca con otro. Esto sucede porque los cervatillos crecen rápido y se hacen tan grandes como sus madres, pero las siguen durante el primer año o más. Una cierva suele tener dos crías, así que si ve a un ciervo, disminuya la velocidad y espere que aparezcan otros dos.

En otoño, cuando caen las hojas, migran. Más de la mitad de los atropellos de ciervos ocurren los meses de octubre y noviembre. La época de celo es una de las causas. Sin embargo, el máximo de colisiones coincide con la temporada de caza. Si ve vehículos de cazadores estacionados en la carretera, tenga cuidado con los ciervos que huyen despavoridos de los cazadores y de los disparos. Asimismo, por la noche, puede encontrar ciervos desorientados y perdidos porque al ser perseguidos por los cazadores, están intentando buscar el camino de regreso.

Si, desgraciadamente, choca con un ciervo, agáchese. La muerte de los conductores tiende a producirse al impactar el ciervo contra el parabrisas y romperlo. Cuanto más agachado esté, más posibilidades tendrá de salvar su vida si se produce el impacto.

Aves

Muchas aves no pueden levantar el vuelo lo suficientemente rápido para evitar a un vehículo que se aproxima sin utilizar la corriente de aire producida por el vehículo que les da un impulso extra. Si frena demasiado en seco al ver un pájaro que vuela delante de usted, le quitará el empuje que necesita y el pájaro se estrellará contra el parabrisas. Levante el pie del acelerador y frene con suavidad, poco a poco, hasta que el ave se eleve por encima de su coche o se aparte hacia un lado. Tenga especialmente presente que las aves pueden volar en la carretera cuando están cerca de una potencialmente apetecible fuente de alimento, como bayas o cualquier otra especie de fruta en fermentación o en campos recién regados, repletos de insectos.

A finales de la primavera, si sobre una carretera hay árboles que se juntan en forma de arco, se debe contemplar la posibilidad de que las crías caigan de los nidos al asfalto. Si quiere rescatar uno o varios animales en la carretera, tome precauciones excepcionales. Señale su posición con los triángulos en ambas direcciones si es de doble sentido y póngase el chaleco reflectante. Use también su coche como escudo contra el tráfico y siempre con los cuatro intermitentes encendidos.

Perros

Nada menos que 1,2 millones de perros mueren en las carreteras de los Estados Unidos cada año. Muchos de ellos estaban persiguiendo algo —una pelota, un niño, un gato, una ardilla, etc.—. Cuando vea en la carretera algo susceptible de ser perseguido por un perro, ¡busque al perro!

Gatos

Los coches mataron alrededor de 5,4 millones de gatos al año en la década de los noventa. ¡Más de los que fueron sacrificados en los refugios de animales de los Estados Unidos! Desde entonces, tanto el número de gatos atropellados como los que han sido sacrificados en refugios ha caído en picado, hasta aproximadamente los 500.000 atropellados y 2,5 millones en refugios. Pero ha sido debido porque los programas de captura-esterilización-reintroducción han reducido notablemente la población de gatos callejeros.

La mayoría de los gatos son atropellados por la noche. Normalmente los gatos saben que los coches son peligrosos, pero confunden la luz de los faros con el propio vehículo. Cuando las luces de los faros van hacia ellos, piensan que lo más seguro es salir corriendo. Tenga presente que cometerán ese error y esté preparado para reaccionar.

Ardillas, conejos y erizos

Las ardillas, los conejos y los erizos se encuentran entre las especies más difíciles de evitar. Cuando están en el suelo, ambos huyen de los depredadores gracias a su capacidad de cambiar rápidamente de rumbo. Un toque rápido de bocina puede inmovilizarlos y mantenerlos fuera del peligro. Si ve una ardilla o un conejo corriendo delante de usted puede significar que está siendo perseguido por un depredador. Si es un zorro o un perro, por lo general, tienden a pararse frente el coche, aunque no es seguro. Si, por el contrario, les persigue un halcón, búho, o águila, tenga en cuenta que podrían chocar contra el coche. El erizo es el más vulnerable; cree que con su autoprotección y enroscarse es suficiente.

La manera más segura de evitar un conejo o una ardilla es detenerse y esperar hasta que el animal esté fuera de peligro. Mientras siga avanzando, el conejo o la ardilla continuará viendo su coche como una amenaza similar a un perro o zorro, solo que más grande, o como un halcón, e irá cambiando de rumbo. Esto explica por qué algunos estudios han descubierto que la velocidad no es un factor principal en los atropellos de ardillas y conejos, más propensos a ser golpeados por un coche lento que otro que va a gran velocidad, simplemente porque corren en zigzag en la dirección equivocada, intentando adivinar en qué dirección irá el conductor.

Afortunadamente, es fácil anticiparse cuando vea un conejo o una ardilla. Los conejos son más abundantes en áreas boscosas, o junto a las zanjas de matorrales, desde finales de primavera hasta el final del verano. Pueden verse tanto de día como de noche. Por la noche se quedan inmóviles al ver el resplandor de los faros. 

Las ardillas salen a las carreteras en mayor número a finales del verano, cuando el clima es ventoso en el inicio de la caída de las hojas buscando en los bordes de la carretera nueces comestibles. La presencia de ardillas se mantendrá abundante en las carreteras durante todo el año en las zonas arboladas donde no cubre la nieve, y en zonas donde nieva seguirán apareciendo hasta después de que la primera nevada cuaje. Normalmente sólo salen a plena luz del día.

Ganado, caballos y osos

Se suelen atropellar en zonas montañosas y boscosas donde hay vallas rotas que, por lo general, limitan corredores naturales de animales que llevan hacia riachuelos. Son difíciles de ver por la noche, ya que suelen ser oscuros, y tienden a estar por encima del foco visual del conductor, que es donde se une el haz de luz y la calzada.

Si una vaca se encuentra en la carretera, el coche recorrerá entre 8 y 10 metros antes de que la mayoría de los conductores identifiquen al rumiante. Si es un caballo, pueden ser 10 metros de recorrido. En ambos casos se reduce notablemente el tiempo de frenado, especialmente si se conduce demasiado rápido.

El ganado suele escaparse de los rebaños, al romperse las vallas. Ante la proximidad de un peligro se quedan quietos lo que aumenta la probabilidad de ser golpeados si no se los ve. Los dominantes de la manada son, casi siempre, los más perjudicados, ya que una vez un miembro comienza a moverse en una dirección determinada, lo más probable es que los demás le sigan.

Es más difícil anticiparse a las reaccione de los caballos; algunos actúan como si fueran ganado y otros huyen como los ciervos.

Los osos —difíciles de encontrar en España, pero no en el resto de Europa— no suelen verse en absoluto, hasta que es demasiado tarde. Si usted ve una masa oscura donde sólo debería ver la carretera, piense que es un oso. Afortunadamente, rara vez permanecen rezagados en las carreteras, pero a menudo comen bayas en las cunetas, y pueden ser golpeados si las carreteras son estrechas, ya que están centrados en las bayas y no en el tráfico. Cuando el tráfico es rápido y frecuente, por lo general cruzan la carretera en una carrera mortal. Las hembras suelen ir seguidas por los cachorros, como ocurre con los ciervos. Por tanto si ve un oso, busque uno o dos más.

Lo más importante que puede hacer cuando se topa con uno de estos animales en la carretera es parar. No toque la bocina y no intente ser más rápido que él; simplemente pare lo antes posible evitando dar un patinazo. Hay que darles tiempo para reaccionar: apártese y proceda con cautela. Las colisiones con ganado, caballos y osos son frecuentemente fatales para el conductor, ya que al golpear las piernas del animal, el cuerpo rompe el parabrisas, aplastando a los ocupantes.

Ranas

En caso de lluvia, si está cerca de una charca o zanja y aún no hace frío, es probable que vea ranas. Algunas especies se quedan inmóviles a la luz de los faros. Otras sólo siguen saltando. Reduzca la velocidad y trate de rodearlas.

Tortugas

Si usted ve una piedra en el camino que parece más grande de lo que suelen ser las piedras en las carreteras o parece moverse aunque lentamente, piense en una tortuga.

Si se para a rescatarla, recuerde utilizar el coche como escudo contra el tráfico y tomar las precauciones anteriormente descritas. Mueva la tortuga hacia el lado del camino a donde se dirige, ya que suelen migrar siguiendo rutas estrictamente establecidas.

Serpientes

Las serpientes, al ser de sangre fría, a menudo se calientan en las carreteras. Si usted ve un objeto recto que parece un palo en el camino, podría ser una serpiente. Para evitar atropellar al reptil, le recomendamos que piense que lo es, hasta que esté seguro de que no es así. Al final del día, cuando baja la temperatura, las serpientes pueden entrar en letargo y son incapaces de moverse sin ayuda.

 

Ong ADDA -Diciembre 2013


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